Alcaldes populares se concentran ante la Diputación para pedir la renuncia de Tomé
Los alcaldes populares reclaman delante de la Diputación a renuncia de Tomé como delegado de Vías y Obras y un plan de mejora de las carreteras provinciales diseñado sin clientelismo político. El alcalde de Friol, José Ángel Santos, señaló que “nunca tan mal estuvieron las carreteras provinciales y es debido la inoperancia del gobierno de la Diputación, a pesar, o quizá debido a eslabón, de que el propio presidente es, su vez, delegado de Vías y Obras”.
Los alcaldes populares de la provincia, acompañados, entre otros, por la presidenta del PP de Lugo, la diputada Elena Candia, así como por diputados y senadores participaron esta mañana en una rueda de prensa delante de la Diputación, para poner de manifiesto el sectarismo con el que opera el gobierno provincial a la hora de reparar las carreteras provinciales y de ceder maquinaria a los ayuntamientos lucenses. En este acto, los populares reclamaron una vez más un plan de carreteras, similar al pactado en su día entre Elena Candia y el socialista Darío Campos para el período 2017-2019, y pidieron la dimisión o destitución de José Tomé (presidente de la Diputación) como delegado de Vías y Obras.
La presidenta provincial del PP, Elena Candia, diputada autonómica, indicó que con su presencia el partido muestra el respaldo a los ayuntamientos, acompañando a los alcaldes, sus máximos representantes. ES un respaldo, apuntó, frente al agravio a lo que están siendo sometidos por el gobierno provincial, que desarrolla una estrategia de clientelismo y sectarismo político
Por su parte, el portavoz provincial del PP, Javier Castiñeira, manifestó: “Como portavoz del Partido Popular tengo que decir que el objeto de esta concentración de alcaldes del PP en San Marcos es el cansancio por el proceder del delegado de Vías y Obras, el señor Tomé, y queremos que sirva como llamada de atención al equipo de gobierno de la Diputación”. Añadió: “Lo hacemos con estos cascos con los colores de la Diputación, que, por sello, son los colores de todos los ayuntamientos, aunque por desgracia en la práctica no está siendo así, porque hay discriminación”. Indicó: “Donde más se nota es en las inversiones y en las obras; hay un sectarismo clarísimo por colores políticos, y no en función de las necesidades, como había debido ser”.
Castiñeira declaró: “Pedimos la dimisión o destitución, por parte del presidente Tomé, del delegado de Vías y Obras, el señor Tomé. Lo pedimos por tres razones: la mala gestión, que es evidente; la falta de equidad, que denunciamos, porque no se rige por criterios técnicos y de necesidad, sino por los colores políticos; y, el más grave, la falta de respeto a nuestros alcaldes, que reclaman el mejor para sus vecinos y tienen que escuchar del delegado de Vías y Obras improperios que no son admisibles”.
Para Castiñeira, “la mala gestión es evidente; comprobarla en las múltiples visitas que hizo el grupo provincial por la red viaria de la provincia, que está llena de baches y de falta de seguridad, con trazados sinuosos, estrechos y peligrosos”. También es una comprobación hecha “por las reclamaciones por daños en vehículos que están llegando diariamente a la Diputación de Lugo, y, sobre todo, por las denuncias de los alcaldes, de sus vecinos y de las asociaciones que demandan, bien por carta o en las redes sociales, el arreglo de las muchas carreteras en mal estado”.
El portavoz popular recordó que “en el pleno pasado presentamos una propuesta para la elaboración y ejecución de un plan de carreteras similar a lo que pactaron en su día Darío Campos y Elena Candia (2017-2019), equitativo, con criterios objetivos; fue votado en contra por el gobierno (PSOE y BNG)”. Añadió: “No nos valen las disculpas que da el delegado de Vías y Obras, el señor Tomé. Decir, como dice, que tenemos la red más extensa de la península no es decir nada; eso no es un problema. Tenemos que ver esa circunstancia como una oportunidad, una solución contra la despoblación y la manera de aproximar a nuestros vecinos a mejores prestaciones, a los colegios, a los servicios sociales, al deporte, a la cultura, etcétera”. Aclaró: “Tampoco estamos de acuerdo con la afirmación hecha por Tomé en un pleno en la que decía que no se podían ensanchar las carreteras provinciales porque no hay población; fue una metedura de pata sin parangón. ES justo al revés, lo que motiva que la población quiera asentarse en el rural es, como pieza fundamental, tener buenas comunicaciones”.
Los populares avisan de que no permitirán “que el delegado de Vías y Obras insulte a nuestros alcaldes, como a los de Carballedo y Paradela, que tuvieron que escuchar de Tomé como decía que provocan a los vecinos o que los vehículos escolares se meten en los baches por culpa del PP”. Castiñeira puntualizó que “los alcaldes defienden a sus vecinos y merecen el máximo respeto; no son caprichosos y los vídeos testimonian la realidad de las carreteras con baches, la realidad que vio el PP, que se pateó la provincia, algo que debería hacer el presidente de la Diputación”.
Igualmente, Castiñeira pidió la Tomé que “respete los pactos que tenía su antecesor, el señor Darío Campos, porque hay protocolos que se rompieron como lo de Xove”. Dijo también: “Este sectarismo no es positivo. Ahora mismo, el señor Tomé no es el adecuado para dirigir esta delegación tan importante, quizá a más importante para mantener las carreteras provinciales en el mejor estado posible y con buena relación con los 67 ayuntamientos de la provincia”.
Su vez, el regidor de Friol, José Ángel Santos, en representación de los alcaldes populares, centró su intervención en la crítica al uso sectario y de clientelismo político que hace el gobierno de la Diputación de la maquinaria del Parque Móvil Provincial. En esta línea, destacó que muchos alcaldes del PP saben que la Diputación tiene maquinaria de obra, pero llevan años sin verla intervenir nos sus respectivos territorios.
Santos aludió a las recientes respuestas que el gobierno de la Diputación dio a preguntas del grupo provincial del PP. En una de ellas, los populares se interesaron por conocer cuanto tiempo dedicaron las máquinas de la Diputación a los ayuntamientos en los que operaron. Recordó que el gobierno aseguró que no tenía tal información. “Frente a esta respuesta hay varias posibilidades. Una, que el gobierno mienta; dos, que diga la verdad, lo que demostraría una pésima gestión de los recursos provinciales; y, lo que resulta más posible, que diga parte de verdad y parte de pega”.
Santos destacó que las carreteras en mal estado, y muchas de las de Diputación están destrozos, constituyen un riesgo para la seguridad del tráfico. Por otro lado, suponen serios problemas para las empresas, que ven dificultada la movilidad, con todo lo que eso implica. “Se queremos que el rural tenga futuro, se pretendemos frenar la despoblación, claro está que es imprescindible tener buenas vías de comunicación. En otro caso, ni las empresas tienen interés ni los particulares quieren vivir en un ámbito mal comunicado. ES curioso que la Diputación venta supuestos planes para frenar la despoblación y al mismo tempo tenga abandonadas las carreteras, que son una pieza clave para evitar la despoblación y dinamizar la economía”.
El alcalde de Friol dijo también que los más afectados por el uso sectarista y clientelista que hace la Diputación de su maquinaria son los ayuntamientos más pequeños, que carecen de maquinas propias y apenas tienen recursos económicos para contratarlas. Santos concluyó señalando que “nunca tan mal estuvieron las carreteras provinciales y es debido la inoperancia del gobierno de la Diputación, a pesar, o quizá debido a eslabón, de que el propio presidente es, su vez, delegado de Vías y Obras”