El BNG reivindica en Lugo los avances logrados en las Cortes en infraestructuras, políticas sociales y financiación

El Bloque Nacionalista Galego mantuvo un encuentro con la vecindad de Lugo en el que trasladó su actividad política en las Cortes del Estado y puso en valor los resultados obtenidos en los últimos años para mejorar la calidad de vida de la ciudadanía lucense. La formación nacionalista subrayó tanto los avances en infraestructuras consideradas estratégicas para la provincia, con especial atención al ferrocarril y a la seguridad vial, como los logros alcanzados en el ámbito social, entre ellos la revalorización de las pensiones mínimas por encima del IPC y la ampliación de los permisos de paternidad y maternidad. Todo ello, según el BNG, frente a la negativa del Partido Popular a respaldar medidas como la quita de la deuda.
En el acto celebrado en la ciudad participaron el teniente de alcalde de Lugo, Rubén Arroxo, y la diputada provincial Iria Castro, quienes destacaron el trabajo continuado que desarrollan en las Cortes del Estado los representantes del BNG, Néstor Rego y Carme da Silva, en defensa de los intereses de Galicia y, en particular, de la provincia de Lugo. Desde la organización insistieron en que las fuerzas estatales actúan condicionadas por sus direcciones en Madrid, llegando incluso a votar en contra de iniciativas del BNG que tendrían un impacto directo en el bienestar de la ciudadanía lucense, en contraste con la coherencia que, a su juicio, mantiene el Bloque en la defensa de los intereses gallegos.
En el ámbito de las infraestructuras, Néstor Rego puso el acento en el impulso dado a diferentes proyectos desde la firma del primer Acuerdo de Investidura. En materia ferroviaria, destacó la modernización, duplicación y electrificación de la línea Lugo-Ourense, así como el inicio de los estudios para una futura conexión entre Lugo y Santiago. También recordó que la mejora de la línea A Coruña-Lugo forma parte de los compromisos asumidos por el Gobierno con Galicia gracias al acuerdo con el BNG, al tiempo que se trabaja en la implantación de nuevos servicios ferroviarios adaptados a la realidad del país. En este sentido, subrayó la importancia de la próxima puesta en marcha del tren de proximidad, incluido en el acuerdo de investidura y recogido en la Ley de Movilidad a iniciativa del Bloque.
En materia viaria, el diputado nacionalista se refirió a las actuaciones para mejorar la seguridad en puntos especialmente conflictivos de la red de carreteras del Estado y a la finalización de los viaductos de la A-6. Además, avanzó que el BNG seguirá presionando para que se concluya cuanto antes la A-54 y para que se reactive, de una vez por todas, el proyecto de la autovía que conecte Lugo y Ourense.
Junto a las infraestructuras, Rego reivindicó los avances sociales impulsados por el BNG, como la subida de las pensiones mínimas por encima del IPC, aunque advirtió de que es necesario seguir trabajando para alcanzar el objetivo de situarlas en el 60 % del salario medio. También hizo referencia al incremento de los permisos de paternidad y maternidad hasta las 20 semanas, una medida incluida en el acuerdo de investidura que, aun sin estar plenamente ejecutada, ya alcanza las 19 semanas.
En el plano internacional, el diputado del BNG defendió la necesidad de priorizar políticas de diálogo y paz en un contexto global complejo y criticó el aumento del gasto en defensa frente a la urgencia de reforzar las políticas sociales. En este marco, puso en valor el trabajo desarrollado por el Bloque en relación con la situación en Palestina y las iniciativas presentadas en las Cortes para denunciar e intentar frenar lo que calificó como genocidio cometido por el Estado de Israel contra el pueblo palestino.
Por último, Néstor Rego fue especialmente crítico con la postura del Partido Popular respecto a la quita de la deuda acordada gracias a la negociación del BNG. A su entender, la negativa del PP resulta incomprensible porque antepone el cálculo partidista al interés general de Galicia, al rechazar una medida que reduce la presión financiera y abre la puerta a mayores inversiones en servicios públicos y desarrollo. Esta actitud, concluyó, demuestra una falta de compromiso con el país y una preferencia por el ruido político frente a la defensa clara de los intereses de la ciudadanía gallega.