Sin embargo, desde la dirección general del Club no cerraron la puerta a volver a contar con el equipo femenino, sino que este estaría condicionado a la vuelta al fútbol profesional
Las jugadoras de los equipos femeninos A y B del Club Deportivo Lugo denunciaron públicamente la desaparición de ambas secciones tras ser informadas por sus entrenadores, y no por la nueva directiva del club, según manifestaron en un comunicado conjunto.
"En ningún momento fuimos informadas por parte de la nueva dirección del Club de la desaparición del equipo femenino y lo hicieron tarde, sin dejarnos margen para comenzar pretemporadas o encontrar un nuevo destino para nuestra trayectoria deportiva", señalaron las futbolistas, visiblemente afectadas por lo que consideran una falta de respeto y de transparencia.
Las jugadoras califican como "una vergüenza" que en pleno 2025 "la primera decisión importante de un club sea deshacerse de una sección que lleva 6 años trabajando y compite en 3ª RFEF, con una cantera recientemente ascendida a 2ª Gallega".
Asimismo, lamentan no haber tenido “ni voz ni voto” en una decisión que pone fin a un proyecto deportivo consolidado. “La nueva dirección decidió prescindir de nosotras sin darnos siquiera una explicación”, denuncian.
Reacciones divididas en la ciudad
El silencio institucional por parte del Club Deportivo Lugo, que no emitió ningún comunicado oficial confirmando ni desmintiendo la desaparición del equipo femenino, generó aún más malestar entre las afectadas y la sociedad lucense.
Mientras algunos defienden la continuidad del equipo femenino como una inversión en igualdad, otros justifican la decisión argumentando razones económicas. “Es lógico, nadie iba a ver esos partidos”, expresaban algunos usuarios. Sin embargo, las jugadoras respondieron tajantes: “El femenino no era un gasto inasumible, era un proyecto mal gestionado y sin el apoyo necesario desde dentro del club”.
También subrayaron que más allá de la rentabilidad inmediata, el fútbol femenino representa “una inversión en igualdad, en futuro y en la identidad del Club y de la ciudad”.
Para una de las entrenadoras del equipo femenino, "es una pena" perder la plaza en 3ª RFEF, "ya que trabajamos mucho estos 6 años, pero también fue una suerte poder participar de esta categoría y desde el Club se hizo una labor muy grande", defiende. Así, dice entender la postura de las jugadoras, a las que nota "decepcionadas con el hecho y con la forma de proceder", pero mantiene una opinión mediadora, en la cual entiende que "el Club Deportivo Lugo es una empresa y tiene que hacer recortes en el momento actual".
Además, explica que desde la dirección general del club no cerraron la puerta a volver a contar con el equipo femenino, sino que esto estaría condicionado al ascenso del primer equipo masculino, ya que una vez de vuelta al fútbol profesional, se contaría con más presupuesto para hacer frente a los gastos que supone mantener el primer equipo, la cantera y el femenino.
CRÍTICAS DESDE LA VICEPRESIDENCIA DE LA DIPUTACIÓN DE LUGO
La Vicepresidencia de la Deputación de Lugo ha manifestado su pesar por la decisión del Club Deportivo Lugo de prescindir de sus dos equipos femeninos, una noticia conocida a través de los medios de comunicación. El vicepresidente provincial, Efrén Castro, valoró esta determinación de la nueva directiva como “un tremendo paso atrás tras seis años de trayectoria de la estructura femenina, que va en contra del progreso del deporte y de la sociedad lucense hacia la igualdad y que empequeñece al CD Lugo”.
Castro subrayó que clubes con la capacidad económica, estructura y apoyo social del CD Lugo asumen una responsabilidad adicional por su condición de referentes para otras entidades deportivas. En este sentido, cuestionó que se aleguen motivos económicos o de rentabilidad para justificar esta decisión, recordando que el club gestiona “una cantidad importante de recursos públicos de diferentes administraciones, precisamente en función de su relevancia y proyección social”.
El vicepresidente incidió además en el perjuicio que esta eliminación supone para las futbolistas que esperaban continuar en el club y para las jugadoras de categorías base de toda la provincia, que verán reducidas las oportunidades para desarrollar sus trayectorias deportivas dentro del fútbol femenino.