La planta textil GAMA de Altri en Palas de Rei posiciona a Galicia como referente europeo en fibras biodegradables y reciclaje textil

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Según Gabriel Sousa, director de I+D de la compañía, este complejo supondrá un punto de inflexión para el desarrollo de nuevos materiales textiles en Europa
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5 Jun 2025

Galicia se posiciona en la vanguardia de la industria textil sostenible gracias a la planta industrial que Altri, a través de su filial Greenfiber, construye en Palas de Rei. Según Gabriel Sousa, director de I+D de la compañía, este complejo supondrá un punto de inflexión para el desarrollo de nuevos materiales textiles en Europa: “El sector de la moda necesita fibras biodegradables, y GAMA responde a esa demanda con un proyecto europeo de referencia”.

La planta producirá dos materiales clave para el futuro textil: fibra soluble de madera y Lyocell, ambas basadas en celulosa de eucalipto. Con una capacidad total de 250.000 toneladas anuales, 60.000 se destinarán a fabricar Lyocell directamente en la planta, mientras que las 190.000 restantes se distribuirán entre otros fabricantes del sector. Estas fibras son 100% biodegradables y reciclables, lo que refuerza el compromiso con un modelo de producción circular.

Además, en una segunda fase, GAMA incorporará una planta de reciclaje textil que permitirá reutilizar materiales y reducir la huella ambiental del sector. “Ningún proyecto europeo ha alcanzado escala industrial en este ámbito; contar con una planta como la nuestra será determinante para avanzar en el reciclaje textil”, afirma Sousa.

El Lyocell, producido en GAMA, servirá como base para la elaboración de hilos y tejidos sostenibles que se emplearán en ropa, textiles del hogar y productos técnicos. Por su parte, la fibra soluble alimentará tres cadenas de valor: fabricantes de fibras textiles como viscosa o acetato, industrias de tejidos no tejidos para uso sanitario o doméstico, y fabricantes de filamentos de Lyocell de alta calidad, similares a la seda.

Sousa remarca que este proceso no guarda relación con la producción de papel, ya que se trabaja con celulosa casi pura, excluyendo componentes como lignina y hemicelulosa, y se emplean blanqueantes sin cloro, más respetuosos con el medio ambiente. “Transformar fibra de madera en productos textiles como el Lyocell es un proceso de alta tecnología y química avanzada, muy distinto al papelero”, concluye.

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