Los vecinos de Negueira se unen para luchar contra el parque eólico Valvaler
El vecindario de Negueira de Muñiz se une para luchar contra el Proyecto del Parque Eólico Valvaler. Este proyecto está localizado en los ayuntamientos de Ibias y Allande, en la zona del Alto de Valvaler, Penedo de los Valíos y Busbeirón que, aunque están en Asturias, hacen frontera directa con el ayuntamiento de Negueira de Muñiz. Pretenden construir 14 aerogeneradores que, junto con el tendido eléctrico para la canalización de energía, se extienden por el Paisaje Protegido Sierra de Carondio y Valledor, afectando gravemente a Hábitats de Interés Comunitario y especies protegidas como el oso pardo, el urogallo cantábrico, el murciélago nóctulo grande o el peto mediano. Pero, además, no tiene en cuenta a afectación y legislación en el territorio gallego. Es tal la falta de precisión del proyecto que confunde el Ayuntamiento lucense de Negueira de Muñiz, también espacio protegido, con una parroquia asturiana.
Las instalaciones proyectadas afectarían numerosos espacios de la Red Natura 2000, siendo los más próximos las Zonas de Especial Protección para las Aves ( ZEPA) de Fuentes del Narcea, Degaña e Ibias, la ZEPA de Muniellos, las Zonas Especiales de Conservación (ZEC) de Río del Oro y Negueira, que se encuentran dentro del área de influencia de 5 km de las futuras instalaciones. De hecho la más próxima es la ZEC de Negueira que se localiza a solo 49 m del aerogenerador V-09. Por otra parte, resulta llamativo que se obvia por completo el Plan de Recuperación del oso pardo aplicable en la zona.
En el propio proyecto se hace referencia a la fragilidad del paisaje que se vería afectada y se reconoce que la construcción del parque eólico llevará asociado un riesgo de erosión debido al movimiento de tierras y que, paralelamente la presencia de la línea de alta tensión y el funcionamiento de los aerogeneradores aumentarán el riesgo de incendio. También se mencionan efectos directos e indirectos sobre fauna, vegetación, y contaminación acústica y visual, entre otros.
Los desmontes necesarios para su montaje desharían por completo varias montañas, ya que los accesos no pueden superar el 7% de desnivel, cuando los existentes son superiores al 14% y son varios metros más estrechos de lo necesario. Por lo tanto, la pérdida de la cubierta vegetal sería alarmante y afectaría al hábitat de especies protegidas como oso pardo, lobo, gallina de monte, bolsillo mediano, buitre leonado, halcón peregrino, águila real, nóctulo grande, etc., y flora como alcornoque, fresno de hoja estrecha y acebo. A mayores de las muertes por colisión, la fragmentación del territorio que supone, comporta la problemática de la deriva genética, efecto isla, y extinción de dichas especies ya de por sí amenazadas. Además, también tendría efectos nocivos sobre la salud por el ruido y a los campos electromagnéticos que se originan, y producirá cambios drásticos en el clima de la zona dependiendo de la orientación de los aerogeneradores, interferencias en la red de comunicaciones, contaminación lumínica nocturna y gran impacto socioeconómico (despoblación y desvaloración turística).
Por otra parte, el proyecto afectaría al patrimonio cultural que se encuentra a menos de 10km de los aerogeneradores, incluyendo una larga lista (Castro- Collada, Explotación de Villalaín, Petroglifos de Pena Colmena, Conjunto del Pozo de las Mujeres Muertas, Torre del Valledor, etc.) en la que no aparecen enumerados los bienes localizados en Negueira. También, la línea de alta tensión propuesta sobrevuela el Camino de Santiago en tres puntos.
Finalmente, se argumenta un envejecimiento de la población que no se corresponde con la tendencia que se está viviendo en el Ayuntamiento de Negueira. Esta tendencia contraria pone de manifiesto a especial valoración del medio natural y sensibilidad hacia una economía sostenible que tiene la población de Negueira y que posibilita que la juventud pueda vivir en medio rural sin poner en peligro el futuro de las generaciones próximas.