El proyecto, que abarcará los 10.950 metros cuadrados del URPI-58, busca consolidar este espacio como un área recreativa y de esparcimiento en el corazón de la ciudad de Lugo.
El ámbito incluye una pequeña superficie destinada a viales, 1.590 metros cuadrados para equipamientos públicos vinculados a suministros, como el abastecimiento de agua o el sistema eléctrico, y la mayor parte, 8.178 metros cuadrados, será habilitada como una zona verde pública.
“Con este cambio normativo avanzamos en nuestra hoja de ruta para lograr el doble objetivo de proteger este espacio y permitir que todos los lucenses puedan disfrutar de un área recreativa en pleno corazón del entorno urbano. Además, se conectará con las Costas del Parque y el Rosalía de Castro, mejorando la conexión del Centro Histórico con el entorno del río Miño a través de un corredor verde que encaja con el modelo de ciudad en el que hemos estado trabajando”, destacó la alcaldesa, Paula Alvarellos.
APOYO DE LA XUNTA DE GALICIA
La modificación, que será aprobada en la próxima Junta de Gobierno Local, cuenta con la evaluación ambiental favorable de la Xunta de Galicia y con el informe positivo de diversos servicios técnicos municipales.
“Es un avance muy importante que requiere un proceso administrativo garantista. Los técnicos municipales están cumpliendo paso a paso la hoja de ruta. Una vez finalizada esta fase inicial, podremos dar nuevos pasos para alcanzar el objetivo final: proteger nuestra ciudad y poner estos terrenos al servicio de la ciudadanía”, añadió la regidora.
El proceso comienza con la aprobación inicial en la Junta de Gobierno Local, seguirá con su elevación al pleno municipal y se abrirá un período de información pública. Posteriormente, se recopilarán los informes sectoriales necesarios antes de la aprobación provisional y definitiva, que también será debatida en sesión plenaria.
