Olalla Rodil denuncia la situación en la residencia de San Antonio de Padua de Lugo

"Según nos cuentan y como pudimos comprobar, en el turno de noche solo hay dos personas trabajadoras para atender las 85 residentes que viven actualmente en la residencia", dice

Olalla Rodil, en representación del BNG, le pidió a la Xunta de Galicia que exija a la empresa concesionaria, la Fundación Fesán, que refuerce el plantel de la en la residencia de Sano Antonio de Padua para garantizar la máxima calidad asistencial en todos los turnos, especialmente en la noche.

Además, dice, es imprescindible reformar la normativa que regula las rateos de personal que se rige por una Orden de 1996, de hace veintiocho años. "No se ajusta a la realidad actual".

Fueron familiares de las personas usuarias quien alertaron al Bloque Nacionalista Galego del que está aconteciendo en la residencia Sano Antonio de Padua, en Lugo, inaugurada hace apenas unos meses. "Según nos cuentan y como pudimos comprobar, en el turno de noche solo hay dos personas trabajadoras para atender las 85 residentes que viven actualmente en la residencia, de las cuales 60 son grandes dependientes. Para atender todas las personas usuarias disponen de 6 gerocultoras en el turno de mañana y 5 en la de tarde así como dos enfermeras. En el turno de noche el personal se reduce a apenas dos personas para atender todas las personas usuarias", explican los nacionalistas.

“El PP cree, realmente, que se puede garantizar una buena calidad asistencial con este personal tan reducido?", se pregunta la diputada nacionalista. "Mas la escasez de personal no afecta solo a la atención directa, también la otros servicios esenciales como la cocina y la limpieza. En la cocina solo hay una persona cocinera y una ayudante por turno que deben hacer el almuerzo para todo el centro residencial. La limpieza y lavandería la atienden, conjuntamente, dos únicas personas. Este es un plantel absolutamente insuficiente que deja una rateo de 14 personas por gerocultora para atender todas sus necesidades básicas", denuncian.

Desde el BNG se preguntan "se este es el modelo de cuidados que defiende el Partido Popular, privatizar servicios públicos para dejarlos en manos de entidades que tiran a la baja los precios". Desde luego, “para el Bloque Nacionalista Galego la atención de las personas mayores y dependientes es una cuestión de derechos fundamentales que debe garantizarse a través de servicios públicos de la máxima calidad”, concluye Olalla Rodil.