Paco Nieto, periodista y escritor: “La radio fue mi vida”

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El periodista lucense Paco Nieto dedicó 47 años de su vida a la radio y, ahora, ya jubilado, ha presentado el libro ‘Bon proveito, amiguiños. Lugo, 90 anos de radio (1935-2025)'
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22 Oct 2025

Jessica Fernández

Paco Nieto, nacido en Lugo en 1954, comenzó a trabajar en la radio con solo 16 años, “en la mejor profesión del mundo”, como él mismo dice. Inició su trayectoria en Radio Popular, hoy Radio Cope, y trabajó en Radio Lugo (SER) desde 1999 hasta su jubilación. Miembro de la Asociación Nacional de Profesionales de Radio y Televisión desde 1982 y del Colegio Oficial de Periodistas de Galicia, también fue fundador del grupo ‘Fuxan os Ventos’, que hoy da nombre al nuevo auditorio. Impulsó la primera emisora en línea de Galicia, openradio.es; actuó como moderador de los debates de TeleLugo, fue conferenciante en las ‘Primeras Jornadas de Radio Escolar’, organizadas por la Xunta de Galicia, y participa en las ‘Jornadas sobre el presente y el futuro de la radio en Galicia’, organizadas por el Instituto de Estudios de la Comunicación en Santiago. También imparte charlas y conferencias sobre la historia de la radio en Galicia y participa en la organización de la Semana de la Radio Española, organizada por la Diputación Provincial de Lugo. Cabe destacar que a lo largo de su carrera profesional, Nieto realizó cerca de un centenar de programas radiofónicos.

¿Cómo surge la idea de escribir este libro?

En primer lugar, porque este año 2025 se cumplen exactamente 90 años desde que el 27 de octubre de 1935 se inauguró la primera emisora de radio en Lugo. Y la gente se preguntará: “¿Por qué no esperó a que se cumplieran los 100 años?” Pues porque igual ya no andamos por aquí. Ojalá que sí, pero no lo sabemos (ríe). En segundo lugar, el mismo día de la inauguración, don José Trapero Pardo estuvo allí y tuvo continuidad en la emisora, siendo en el año 58 cuando hizo un programa que se llamaba ‘Cousas da nosa terra’, donde contaba costumbres y refranes, de los que recopiló alrededor de 11.000 en gallego; y en ese programa se despedía diciendo: “Bon proveito, amiguiños”. Por eso, este libro también es un homenaje y una forma de ponerlo en valor, ya que considero que José Trapero Pardo está olvidado y me parece una verdadera pena que no se le ponga un pedestal, porque lo merece. Fue miembro de la Real Academia Gallega, director del Museo Provincial de Lugo, el primer y único cronista que hubo en esta ciudad… y nunca se le dedicó el Día de las Letras Gallegas.

¿Qué aportó la radio a Lugo?

Yo creo que fue un cordón umbilical entre el medio de comunicación y la sociedad. La radio en España llegó en 1924 y fue apareciendo en las grandes urbes, hasta que llegó a Lugo 11 años después, donde había 30.000 habitantes y unos 400 aparatos de radio censados. Así, rápidamente en Lugo se empezó a conocer la Casa de la Radio, que estaba en la plaza de Ángel Fernández Gómez, donde estuvo Radio Lugo hasta los años 80, cuando se trasladó a Santo Domingo. Hubo una implicación muy grande de los profesionales, y también mucha gente de la sociedad que quería participar en la radio. Hoy en día, creo que la radio ha perdido su esencia, y la esencia era la cercanía con los oyentes. Cuando digo cercanía, me refiero a lo local, a un informativo, unos discos dedicados, tertulias... estar cerca de los oyentes. Ahora hay otro concepto de radio con grandes cadenas, tremendamente comerciales, y estaría bien que al menos su función estuviera más repartida, ya no hablo de un 50-50, pero quizá de un 60-40 o un 70-30. Por ejemplo, una ciudad como Lugo, igual que muchas otras, no puede tener un informativo local de 10 minutos.

Desde la perspectiva de una persona con tanta experiencia profesional en el mundo de la comunicación, ¿cómo valora esa pérdida de contenido local?

Hay un problema, y es que estamos todos sumidos en una cantidad de información inasumible y, al mismo tiempo, las nuevas generaciones ven las redes sociales como un refugio, pero al final es más ruido y alboroto; y cuando hay saturación, debería haber mecanismos para diversificar y no invadir. No quiero que se malinterprete, no hablo de censura ni limitación, hablo de aportar algo claro dentro de un desorden en el que lo que se busca es manipular y, quién sabe, si dominar a la sociedad y así poder manejarla. Se está llegando a un límite en el que el siguiente paso es el vacío, por lo que se debería reflexionar. Porque, ¿a dónde vamos? A mí me parece importantísimo leer periódicos, releerlos y analizar lo que ponen. Pero no me gusta el exceso de firmas, somos miles de árbitros opinando, deberíamos tener referentes, pero no “invasores”. También está cambiando el lenguaje del periodismo, que, obligado socialmente, se está volviendo más coloquial. Yo considero que muchos articulistas se equivocan cuando incluyen en sus mensajes un insulto, una palabrota... no creo que el periodismo deba hacer eso. El periodismo es una labor que se basa en formar, informar y entretener, y hoy en día muchas veces casi ni entretiene. Creo que esa labor debería recuperarse.

"El periodismo se basa en formar, informar y entretener; y creo que esa labor debería recuperarse"

¿Cree que esa manera de tratarnos entre nosotros y desde los medios de comunicación también viene influida por el ambiente de crispación que se ve en la política?

Yo veo la política “enfurecida”, así de claro. No me gusta lo que veo, ni mucho menos. Y ellos son los culpables porque son quienes están moldeando la sociedad. Creo que no están adecuados ni integrados en la sociedad. Y creo que tienen culpa, y deben pagar por ello. También hay un abandono de la política por parte de la gente, ya no digo más formada, pero sí por personas con una sensibilidad especial como la que existía cuando llegó la Democracia a España en los años 70, cuando había gente con una gran formación cultural y educativa. Hay un hastío entre la gente preparada que no cree que pueda dedicarse a la política porque está demasiado formada y es demasiado legal. En Lugo, este mandato está siendo tremendo especialmente para el PSOE, entre los problemas de salud de los concejales, los fallecimientos y las disputas, no sé a dónde va a parar esta organización política. Por su parte, la candidata del Partido Popular tiene muy polarizado el panorama desde su figura, lo que considero un error. Debería abrir su equipo y saber elegir y delegar. Por su lado, el BNG debería abrirse más y conectar con la sociedad, está encerrado en su asamblearismo y “los nuestros”; podrá alcanzar cuotas importantes, pero no creo que llegue a gobernar. También han vuelto ahora partidos como el Partido Galeguista que intenta hacerse notar; me da miedo que acabemos confundiéndolo todo. Creo que Vox puede entrar en el Ayuntamiento de Lugo, porque hay un hastío y un cansancio que hará que gente joven acabe votando esas ideas.

Su visión del periodista, de la política y de la sociedad en general viene precedida por su labor incansable en favor de la comunicación durante 47 años en Lugo, ¿cómo valora su trayectoria?

Yo solo tengo palabras de agradecimiento, porque encontré personas y compañeros de verdad, de corazón, que se convirtieron en amigos. Tuve jefes, directores, etc., que me abrieron las puertas y dijeron: “Haz”. Por eso depositaron su confianza en mí, y siempre estaré eternamente agradecido. Quiero destacar a Benito Vázquez Regueira, que fue director de COPE Lugo, y a Julio Beberide Martínez, quien me dejó espacio en Radio Lugo para hacer lo que quise. También compañeros como Teresa Castro, Jesús Mato, que estuvo en la tercera emisora de radio que se abrió en Lugo, en 1963, Ondas Populares de Sarria. Y tampoco puedo olvidarme de verdaderos amigos y admirados como Arcadio Silbosa, Pepe Seijo y José Areñas. En definitiva, para mí, la radio fue vida. Es la mejor profesión del mundo porque ni siquiera un minuto se parece a otro.

Con 71 años es difícil ver a Paco Nieto parado, ¿qué viene después de este libro?

Estoy tramando otro libro. Quedé muy satisfecho con este, aunque todo es mejorable, y creo que quedan nombres por mencionar, a pesar de haber al menos 500, pero aprovecho esta entrevista para decir que en la última página del libro está mi dirección electrónica, y si alguien cree que debería mencionar alguna anécdota que no esté recogida, que me escriba, ya que es probable que haya una segunda edición. Y, después, estoy llevando a cabo un proyecto con el que me lo estoy pasando divinamente, que es el objetivo: ocupar mi tiempo de jubilado. Es un libro llamado Querido Lugo, que trata sobre la historia social de Lugo en los años 40 y 50, en el que recojo hechos históricos, salvando las distancias de no ser historiador, pero es una literatura humilde. Espero que haya un Querido Lugo 2 para hablar de los años 60 y 70 y, si la vida me da tiempo, podría continuar. Finalmente, tengo una afición por coleccionar voces de gallegas y gallegos que ojalá alguien continúe cuando yo ya no pueda, porque llevo recogidas alrededor de 3.500 voces de personas de cierta relevancia. Me parece importante conservar y mantener lo que tenemos y evitar recrear ciertos aspectos culturales a través de la inteligencia artificial. Como decíamos antes, no sé hacia dónde vamos, pero yo no lo entiendo.

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