Rubén Arroxo, teniente de alcalde de Lugo: “La planta de Coeses es un ejemplo de lo que no debe suceder"

La diputada del BNG en el Parlamento de Galicia, Montserrat Valcárcel, junto al teniente alcalde de Lugo, Rubén Arroxo, y otros cargos del BNG, reprocharon el voto en contra del PP, la abstención del PSOE y la ausencia de Democracia Orensana en la votación de una propuesta nacionalista que pretendía establecer una normativa clara y garantista sobre las plantas de biometano, como la proyectada en Coeses.
Rubén Arroxo calificó esta votación como “una clara muestra de la incoherencia política del PSOE y del PP, que dicen una cosa en Lugo y actúan de forma contraria en Santiago”. Recordó que el pleno del Ayuntamiento de Lugo aprobó el 29 de mayo por amplia mayoría una moción, con la participación y apoyo de la vecindad de Coeses, para reclamar regulaciones similares. Por ello, criticó que en el Parlamento las mismas fuerzas, incluyendo concejalas del PP de Lugo, rechazaran la iniciativa.
La propuesta del BNG incluía medidas como establecer una distancia mínima de 3.000 metros entre las plantas y los núcleos habitados, restricciones en el tránsito de transporte pesado y un control estricto de los materiales y el digestato. Según Valcárcel, estas medidas buscan proteger la salud, el medio ambiente y la calidad de vida de la vecindad, evitando la proliferación desordenada de estas instalaciones industriales.
La diputada criticó con dureza al Partido Popular, al que acusó de “desvirtuar el debate parlamentario” y de rechazar regulaciones ya vigentes en comunidades gobernadas por el propio PP, como Castilla y León, y en países europeos como Alemania, donde existen plantas de autoconsumo y de menor tamaño. Valcárcel subrayó que el conflicto es real, especialmente para la vecindad de Coeses, que lleva más de un año movilizándose contra un proyecto que consideran estratégico sin justificación.
Arroxo destacó que el BNG defiende un estudio riguroso de los impactos sociales y ambientales antes de implantar proyectos industriales cerca de las viviendas. “La planta de Coeses es un ejemplo de lo que no debe pasar: fue impulsada por la Xunta sin diálogo con el territorio ni garantías para los vecinos”, afirmó.
Finalmente, el teniente alcalde se comprometió a seguir trabajando desde el Ayuntamiento, la Diputación y el Parlamento para impedir que esta planta continúe adelante en las condiciones actuales, asegurando que existen alternativas técnicas y territorios más adecuados para estas instalaciones sin poner en riesgo la salud pública.