UCIN Lugo denuncia "una grave crisis" sanitaria en varios ayuntamientos de la provincia

"La sanidad rural en la provincia de Lugo se enfrenta la una grave crisis que compromete la calidad de vida y mismo la viabilidad de sus pueblos", según denuncia Alfonso Huertas, coordinador de UCIN Lugo. Su denuncia pone voz al "malestar creciente de las comunidades afectadas por la falta de pediatras y médicos de atención primaria, una realidad que limita el acceso a la salud y acelera el abandono de las zonas rurales".
En ayuntamientos como A Fonsagrada, Castroverde o Cospeito, la escasez de profesionales obliga las familias a desplazarse largas distancias para recibir atención básica, "una situación especialmente difícil para una población mayoritariamente envejecida y con necesidades médicas constantes", explica. Expone también que la carencia de pediatras resulta particularmente preocupante: "muchos niños están siendo atendidos por médicos de familia sin formación específica en salud infantil, lo que repercute negativamente en la calidad asistencial".
Además, considera que los centros de salud del rural operan con planteles claramente insuficientes, "donde un único facultativo debe atender grandes áreas sin horarios definidos, generando colapsos y #espera excesivas. La situación se agrava cuándo no se cobren las bajas o las vacaciones del personal médico, dejando a las vecinas y vecinos sin cobertura sanitaria y en un estado de desamparo que alimenta la frustración social".
Huertas reclama una respuesta urgente por parte de la Xunta de Galicia. Afirma que "la gestión sanitaria en el rural de Lugo adolece de planificación y recursos", y critica que "se prioricen los núcleos urbanos mientras los pueblos se convierten en desiertos médicos".
Para revertir esta situación, propone medidas estructurales: "aumentar la inversión en atención primaria", "ofrecer incentivos para atraer profesionales al rural" y "garantizar contratos estables que eviten la fuga de médicos".
Sin estas actuaciones, asegura, "la falta de sanidad no es solo un problema de salud, sino una sentencia para la despoblación". Por eso, UCIN Lugo exige que "la Xunta escuche este grito de auxilio y actúe antes de que los pueblos lucenses queden sin futuro".