Elvira Díaz, presidenta de Michos Lugo: “Mientras tengamos confianza y apoyo, no pararemos”

Jessica Fernández
¿Cuándo y con qué objetivo nace la asociación?
La asociación la constituimos a finales del año 2019 y el objetivo es el de atender y proteger a los gatos de las colonias de la ciudad de Lugo. Hace cinco años no estaba aún aprobada la Ley de Bienestar Animal, ni había atención por parte de ninguna institución, nuestras indagaciones nos llevaron a esa conclusión, y conociendo que hay otras asociaciones tanto en Galicia como en el resto de España que se dedican a este tipo de colaboración social, nos animamos a constituir la asociación. Otros objetivos serían el de denunciar cualquier tipo de agresión en relación con las colonias y procurar la mejoría de su bienestar.
¿Cómo valoran la evolución?
El primer año fue muy discreto desde el punto de vista de la atención que pudimos prestarles. Revisamos las recomendaciones de asociaciones de veterinarios que estudian pequeños animales y su comportamiento, y nos aconsejaron controlar las poblaciones, es decir, aplicar el método CER, que significa captura, esterilización y retorno. Este método requiere mucho trabajo, porque hay que tener la confianza del gato para capturarlo, saber su estado de salud, estar seguro de que es un gato de colonia, no de casa particular... Entonces, lo primero es delimitar la colonia, saber cuántos gatos son, estar seguro de que todos los gatos son comunitarios, saber cuántos son machos y cuántos son hembras, y después castrar, siendo prioridad las hembras. Desde que hemos empezado se ha aplicado el método CER en más de 500 gatos, y en cumplimiento de la ley de Bienestar Animal, se están identificando con microchip a nombre del Concello.
¿Cómo se trabaja en las colonias?
Cada colonia tiene un cuidador o cuidadora, que asume la responsabilidad y aporta información sobre los gatos, su estado de salud y programa la aplicación del método CER según el criterio recomendado de continuidad geográfica; que marca que es preferible tratar las colonias de al lado y así vas haciendo una especie de barrido espacial en el que las colonias van quedando controladas. Cuando una colonia está totalmente controlada se considera cerrada. Aproximadamente, la mitad de las colonias atendidas se consideran cerradas, por eso, cada año incorporamos al método CER unas 5 colonias nuevas.
¿Cuántas colonias tienen controladas?
Ahora mismo contamos con unas 50 colonias gestionadas por Michos de Lugo de las que está informado el Concello de Lugo, y contamos con 60 cuidadoras, voluntarias responsables de esas colonias. Esos voluntarios contactan con nosotras y se hacen cargo, por lo que nuestra capacidad de trabajo a nivel personal es grande en las colonias que atendemos. También tenemos colaboradores que no atienden directamente colonias, pero colaboran en las tareas.
Además del trabajo del día a día, ¿qué otras acciones se promueven?
Nosotros también trabajamos para que se mejore la percepción de las colonias y que la convivencia sea lo más normalizada posible con la ciudadanía. Aunque el tiempo no nos dé para mucho más, organizamos todos los años las Jornadas Felinas, en las que explicamos nuestro trabajo, recibimos formación de expertos, atendemos a las gestoras, colaboradoras y vecinos… Necesitamos contactar más directamente con la Policía Local, con los bomberos y con las asociaciones para explicarles cómo lo hacemos y que nos planteen las dudas. Deberíamos trabajar todos más coordinados y en la misma dirección, si es posible.
¿Cuáles son las necesidades de la asociación?
Nosotros, sobre todo desde el año 2020, trabajamos de una forma organizada económicamente, sabiendo lo que podemos aportar a través de donaciones y una ayuda del Concello de Lugo. A partir del segundo o tercer año, hemos podido concurrir también a otras solicitudes de convocatorias públicas, como las de la Xunta y las del Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030. Sin embargo, las necesidades se han ido incrementando, porque aumenta el número de gatos atendidos cada año y porque, más allá del proyecto CER, que es un acto puntual, al cuidar de los animales, también permanecen en la colonia y, si lo necesitan, hay que llevarlos al veterinario y los gastos también se han incrementado. Nosotros reconocemos la atención y la sensibilidad del Concello de Lugo al iniciar con nosotros, hace cinco años, el convenio que nos permite tener una subvención anual, pero este año aún no hemos cobrado la de 2024, que se debe cobrar en los tres primeros meses del año, por lo que en marzo deberíamos haberla cobrado y no fue el caso, y tampoco sabemos si podremos disponer de la del año 2025.
¿Qué supone esta situación?
Nosotros hemos estado funcionando con atención veterinaria y aplicación del método CER hasta mediados de junio, y hemos gastado el presupuesto disponible en base a las donaciones que recibimos y las ayudas que ya teníamos ingresadas del Ministerio y de la Xunta. Pero nos faltaba recibir el ingreso del Concello. Desde el momento en que detectamos ese retraso, hemos preguntado reiteradamente, pero no se nos comunicó ningún motivo concreto. Lo que sí sabemos es que no tiene que ver con la documentación que nosotros hemos presentado. Hay que destacar que, al firmar el convenio de colaboración con nosotros, el Concello está cumpliendo una obligación que tiene por ley: la Ley de Bienestar Animal, porque en ella se contempla que las colonias felinas son responsabilidad de cada Concello. El Concello de Lugo sí que la está asumiendo incluso antes de la propia aprobación de la ley estatal, porque la ley gallega, de alguna manera, ya lo recogía. Nos consta que el gobierno local está elaborando un Programa de gestión de colonias felinas en el que hemos colaborado, por lo que creemos que desde el Concello sí que hay voluntad por seguir colaborando con nosotras, pero la aprobación de ese programa es imprescindible, porque es un requisito del Ministerio para solicitar las ayudas.
¿Cómo ven el futuro?
Nosotros no barajamos dejar de atender a las colonias. Si tuviéramos que buscar otra ayuda que supone el 40% de nuestra disponibilidad económica, como la subvención del Concello, deberíamos tomar decisiones de cómo seguir trabajando. Lo que no vamos a hacer es llevar a cabo un trabajo que le corresponde por Ley al gobierno local y poner el dinero de nuestro bolsillo, que ya lo hacemos puntualmente, como la alimentación de los gatos de las colonias. Pero nuestro compromiso con las colonias está ahí y ahí seguirá. Lo que sí, necesitamos ayuda. Para cumplir con la gestión ética de las colonias felinas, tal como recomienda el Ministerio de Asuntos Sociales, necesitamos colaboración en la acogida temporal de gatos enfermos, así como en la adopción de gatos junior, así se completaría adecuadamente el control poblacional de las colonias de gatos comunitarios de nuestra ciudad. Con todo, desde la junta directiva de Michos, por toda la trayectoria que llevamos, tenemos que dar las gracias porque nos sentimos muy respaldados, apoyados y empujados, porque los voluntarios aportan su tiempo y su dinero, pero también colaboran con nosotros otras personas que no pueden ser voluntarias activas y queremos agradecerlo. Nuestra forma de trabajar es una forma en la que se confía en la gente y eso es lo que más valoramos. Mientras tengamos la confianza y el respaldo, no pararemos.