María Fernández: “El Club de Lectura de Lugo es un espacio abierto para expresarse y escuchar”

LugoXa
María Fernández, coordinadora del Club de Lectura de Lugo, pone en valor las reuniones sobre diferentes lecturas como “terapia” para la sociedad
Club-de-Lectura-Lugo
20 Apr 2025

Jessica Fernández

“Crear comunidad en un espacio acogedor, fomentar el diálogo y generar una actividad de ocio gratuita y abierta a toda la ciudad” son los objetivos que persigue el Club de Lectura de Lugo, que nació hace ocho años de la mano de su coordinadora, María Fernández. Ella regresó a Lugo después de varios años viviendo fuera y “echaba de menos asistir a actividades culturales que se adaptasen a mi horario”.

Fernández, autónoma, trabaja de lunes a viernes hasta las 21:00 horas, por lo que muchas veces las iniciativas culturales de la ciudad amurallada no se ajustaban a su disponibilidad. Además, como amante de los libros, vio la necesidad de promover un club de lectura que pudiera celebrarse los sábados. Así nació el Club de Lectura de Lugo, que cuenta actualmente con alrededor de 60 integrantes, de los cuales participan de manera habitual entre 15 y 20 personas.

“Al principio nos reuníamos de manera bohemia e informal en bares, donde hablábamos de los libros que leíamos, pero con la pandemia tuvimos que dejar de reunirnos. Después de esta, decidimos retomarlo y encontramos mucho interés y demanda por parte de la gente, ya que había muchas personas con gran interés por la literatura y por poder hablar en un espacio seguro sobre diversos temas. Por eso contactamos con el Área de Cultura del Ayuntamiento de Lugo para ver si podíamos reunirnos en algún lugar público. Así, nos cedieron una celda en la segunda planta de O Vello Cárcere, un espacio que valoramos muchísimo”, explica María.

En concreto, valora “su ubicación céntrica, pero sobre todo la historia del edificio, ya que es bonito reivindicar la historia de la gente que sufrió allí y que ahora ese lugar sirva como espacio de comunidad para compartir y reunirnos. Además, nos gusta porque, a veces, coincide con nuestro club alguna exposición o concierto, y eso también nos enriquece como personas, porque podemos sorprendernos con algo interesante”, destaca.

HABLAR Y ESCUCHAR

En O Vello Cárcere, María Fernández también resalta la acústica, ya que la celda recoge bien el sonido y pueden hablar en mesa redonda escuchándose unas a otras. “Este espacio nos permite estar más cómodas para hablar y escucharnos sin tener que alzar la voz. Es algo importante para cada una de nosotras, pero también para la sociedad, ya que hace falta escucharse con calma”, explica.

Además de crear comunidad, el diálogo intergeneracional “es una de nuestras inquietudes, por lo que lo fomentamos a través de diversos temas que nos preocupan. Elegimos un libro, lo leemos y nos reunimos para compartir lo que nos transmitió esa lectura, reflexionando y compartiendo nuestras perspectivas, así como escuchando a las demás para comprender su punto de vista y poder hacer una introspección que, solas, no alcanzaríamos. Es una terapia para las participantes, porque comparten vivencias personales a través de las historias de los libros. Hay personas que pueden sentirse identificadas con una situación o personaje, y ponerle voz, expresarlo y abrirse es un ejercicio de honestidad contigo misma y también con los demás, por escucharte y empatizar”, valora María.

Por eso, desde el Club de Lectura de Lugo creen que estas actividades promueven un cambio en la sociedad. “Aportamos ideas nuevas a las personas participantes para que puedan cambiar su visión, abrir su mente, ser más acogedoras y comprender otras realidades. Por ejemplo, hace unos meses leímos La mala educación, que trata sobre la infancia de una niña trans, y había personas que no estaban abiertas a este tema, pero tras el encuentro tuvimos también una charla con una persona de Arelas y surgieron nuevas perspectivas. Al final, cambió nuestra forma de ver las cosas, fue un cambio interno al exponernos a ideas nuevas”. Además, la coordinadora del grupo sostiene que también están abiertas a nuevas ideas literarias, como la poesía: “Yo siempre intento hacer un encuentro de poesía porque es un género complicado”.

EL FUTURO

El Club de Lectura de Lugo tiene como proyecto más urgente constituirse como asociación, ya que ahora son un grupo de personas que se reúnen sin otro fin que compartir lecturas, pero María Fernández considera que podrían realizar más actividades si tuvieran apoyo. “Intentamos hacer cada pocos meses encuentros con autores de libros y me gustaría contar con apoyo económico para formalizar estos eventos, porque ahora el peso recae en los propios miembros, ya que se les hace un regalo. Es nuestra responsabilidad constituirnos y poder solicitar esas ayudas, así que es algo en lo que debemos avanzar, porque además hay interés, la gente asiste, nos escriben al correo electrónico y, por tanto, deberíamos darle forma y seguir creciendo”.

Además, comenta que ya han hecho rutas por Lugo, participaron en una cata para probar vinos... “Estamos abiertas a hacer alguna ruta literaria o desplazarnos a algún lugar de la provincia con importancia literaria para conocer ese sitio y ponerlo en valor desde la perspectiva de un Club de Lectura... En definitiva, mejorar y seguir creciendo, ofreciendo a la sociedad lucense un espacio para compartir reflexiones y experiencias”, concluye.

⚙ Configurar cookies
0.063358068466187